El año de presión del CEO de Google, Sundar Pichai
El informe de ganancias excepcional de Google en abril, que provocó la mayor subida en las acciones de Alphabet desde 2015 y llevó su capitalización de mercado a más de $2 billones por primera vez, alivió el temor de que la empresa se estaba quedando atrás en inteligencia artificial.
Sin embargo, durante una reunión general que siguió, quedó claro que Wall Street tenía una visión diferente a la de los empleados de la empresa.
Un empleado comentó: "Hemos notado una disminución significativa en la moral, aumento de la desconfianza y un desconecte entre la dirección y los empleados". Esta opinión fue bien valorada en un foro interno.
La reunión marcó el inicio de un año de opiniones encontradas de la fuerza laboral de Google. Mientras la compañía enfrentaba la presión más intensa desde que salió a bolsa hace dos décadas, el CEO Sundar Pichai, quien asumió en 2015, también se encontraba en la cuerda floja.
Pichai supervisó un crecimiento constante de los ingresos en áreas clave como anuncios de búsqueda y la nube. La empresa lanzó tecnologías innovadoras, amplió su estrategia de IA a pesar de algunos incidentes embarazosos de productos y vio aumentar el precio de sus acciones en más del 40% hasta el cierre del jueves, superando al S&P 500 aunque rezagado en comparación con rivales como Meta y Amazon.
A lo largo del año 2024, muchos empleados cuestionaron la visión de Pichai luego de fallos en productos y reestructuraciones internas, según conversaciones con más de una docena de empleados y correspondencia interna. Sin embargo, a medida que avanzaba el segundo semestre y Google lanzó una serie de productos de IA llamativos, la posición de Pichai mejoró, aunque algunos seguían siendo escépticos.
La presión de la carrera por la IA
Tras la introducción de ChatGPT a finales de 2022, la industria tecnológica vio un aumento de productos de IA por parte de Microsoft y Meta, así como de startups emergentes como OpenAI y Perplexity.
La popularidad de estas herramientas ha afectado la participación de Google en la búsqueda en EE. UU. Se espera que la compañía pierda menos del 50% de su participación en el mercado de publicidad de búsqueda para 2025, lo que será la primera vez en más de una década.
Google respondió a estas presiones con su propia oferta de herramientas de IA. En 2024, la empresa lanzó su familia de modelos de IA bajo el nombre de Gemini y presentó varios productos bien recibidos. Sin embargo, también hizo lanzamientos problemáticos que resultaron embarazosos.
En febrero, Google lanzó Imagen 2, que convertía comandos de usuario en imágenes generadas por IA. Pero el producto fue criticado por sus inexactitudes históricas. Un ejemplo notable fue cuando un usuario pidió ver un soldado alemán de 1943 y la herramienta representó un grupo diverso de soldados con uniformes alemanes de la época.
Después de esto, la compañía retiró la función, reconociendo que había "ofendido a nuestros usuarios y mostrado sesgo". Google indicó que tomaría algunas semanas para relanzar Imagen 2, pero finalmente fue seis meses antes de que resurgiera como Imagen 3 en agosto.
El lanzamiento de AI Overview en mayo también causó reacciones negativas cuando se promocionó como el cambio más grande en la búsqueda en 25 años. Los usuarios rápidamente comenzaron a encontrar problemas con el producto.
Entre los otros desafíos que enfrentó Google, hubo disputas regulatorias significativas en 2024. En agosto, un juez federal dictaminó que la compañía sostiene un monopolio ilegal en el mercado de búsquedas, y en noviembre, el Departamento de Justicia pidió que Google se viera obligado a desinvertir su unidad de navegador Chrome como remedio para la sentencia.
El DOJ ha tomado un enfoque agresivo buscando desmantelar una empresa tecnológica, algo que no se hacía desde el caso antimonopolio contra Microsoft que terminó en un acuerdo en 2001.
Una búsqueda de visión
A pesar de la presión externa, Google logró algunos éxitos notables hacia fines de 2024, lo que resultó en un sentimiento más positivo entre los empleados
La compañía lanzó su suite de modelos Gemini más potente que respalda todos sus productos de IA. Y YouTube superó los $50 mil millones en ingresos por publicidad y suscripciones.
En el tercer trimestre, Google vio el crecimiento más rápido en la nube entre los grandes jugadores tecnológicos, impulsado por un aumento del 35% respecto al año anterior. También ha visto un crecimiento de dos dígitos en los ingresos durante los últimos cuatro trimestres.
Pese a los errores, AI Overview alcanzó casi 1,000 millones de usuarios mensuales para fines de octubre. La demanda por software de IA ha impulsado un crecimiento constante en la infraestructura de la nube de la compañía.
Aún, con Pichai en su sexto año como CEO de Alphabet, no hay certezas sobre su capacidad para guiar a la empresa hacia el futuro. Internamente, los empleados critican constantemente a la dirección, expresando la falta de un líder visionario. Un ingeniero de Google mencionó en una publicación de LinkedIn que "Google no tiene un único líder visionario".
En octubre, la empresa realizó cambios en la dirección de su división de anuncios y búsqueda, reemplazando al jefe de búsqueda Prabhakar Raghavan con Nick Fox. A pesar de los cambios, muchos empleados opinaron que debieron haberse realizado antes.
Choques culturales
A lo largo del año, la moral dentro de Google osciló. Los esfuerzos para reducir costos a fin de invertir más en IA dejaron algunos equipos divididos y crearon más desafíos para Pichai.
En las divisiones de IA y DeepMind, la moral es principalmente alta gracias a las inversiones significativas. No obstante, en otros lugares, las tensiones han aumentado debido a recortes, burocracia y menor confianza en la dirección.
Las actividades de equipo y mejores presupuestos de viaje han ayudado a reforzar los ánimos en las áreas de IA, mientras que otros equipos se sienten menospreciados.
La reciente gestión más estricta sobre discusiones internas sobre temas delicados ha llevado a consecuencias serias, incluyendo el despido de empleados tras protestas contra el Proyecto Nimbus, un contrato de $1.2 mil millones con Amazon que proporciona servicios de computación en la nube al gobierno y ejército israelíes.
Este endurecimiento subraya la tensión entre la dirección de la empresa y sus empleados, quienes están cada vez más preocupados por los fines de la empresa.
Google, IA, liderazgo