Negocio

La hipócrita narrativa de OpenAI y su modelo de negocio

Published February 15, 2025

Recientemente, Elon Musk ha hecho una propuesta sorprendente para adquirir OpenAI, ofreciendo una asombrosa cifra de 94.7 mil millones de dólares. Sin embargo, Musk ha dicho que retirará su oferta si la junta de OpenAI decide mantener su estatus de organización benéfica en lugar de convertirse en una empresa con fines de lucro.

Musk, quien fue uno de los fundadores de OpenAI en 2019, argumenta que su intención es evitar que la compañía sea absorbida por Microsoft y que OpenAI siga siendo, en sus propias palabras, una "fuerza abierta y centrada en la seguridad" que opere por el bien común.

Aunque no se toma partido sobre quién debería controlar OpenAI, la jugada de Musk resalta la hipocresía del modelo de negocio de OpenAI. Esta organización se presenta como una entidad sin fines de lucro, a pesar de que fue establecida aprovechando décadas de trabajo de artistas, académicos y periodistas, muchos de los cuales han contribuido a los medios de comunicación que informan sobre esta historia.

El desarrollo de ChatGPT, el producto estrella de OpenAI, se basa en la recopilación y extracción de contenido con derechos de autor de la web para crear una aplicación que envuelve esa información como si fuera propia. A medida que este servicio gana popularidad, también amenaza con reemplazar las propias fuentes del contenido utilizado para su entrenamiento inicial.

Sam Altman, el actual CEO de OpenAI, ha reconocido que ChatGPT no podría existir sin el contenido protegido por derechos de autor, pero la empresa aún no ha compensado adecuadamente a los creadores por el uso de su trabajo. Esta situación ha llevado a varios propietarios de medios, incluido el New York Times, a demandar a OpenAI, alegando que utilizó ilegalmente estos datos para "entrenar" sus sistemas.

En una ironía notable, OpenAI comenzó a quejarse hace unas semanas cuando un competidor chino, DeepSeek, captó la atención del público. Altman afirmó que DeepSeek podría haber utilizado datos generados por las tecnologías de OpenAI para desarrollar funciones similares en sus propios sistemas, un proceso conocido en este campo como "destilación".

El concepto de destilación se refiere a la "extracción del significado esencial o los aspectos más importantes de algo". OpenAI ha copiado contenido que ha sido creado por generaciones de trabajo humano, que incluye reportajes detallados, análisis coherentes y pensamiento crítico. Ignoran que gran parte de este trabajo no podría haber sido realizado sin periodistas que, en la vida real, hacen preguntas clave a figuras poderosas, incluso cuando estas prefieren esquivar la verdad.

Lo que hacemos se llama periodismo, y ese es el verdadero motor del bien social. Si buscas información profunda, dirígete a una redacción. Nuestro trabajo nunca fue "de código abierto" por buenas razones. Somos profesionales, y muchos de nosotros tenemos responsabilidades financieras. Creemos que nuestro contenido tiene y seguirá teniendo un valor significativo, y si estás leyendo esto, seguramente tú también lo crees.

De modo que, sin importar quién gane en esta competencia por OpenAI, no te dejes engañar por el discurso de altruismo. Los proveedores de inteligencia artificial no son meros destiladores; están robando el barril entero. Nosotros somos los productores, y merecemos ser compensados.

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