Una ganadera de Alberta ahorra tiempo y dinero gracias a la tecnología de IA

Ashley Perepelkin, quien creció en la ciudad, nunca imaginó que terminaría comercializando carne fresca de ganado criado en su propia granja en Alberta con ayuda de la inteligencia artificial.

"Conocí a un chico, y resulta que era un granjero", revela Perepelkin. Tras conocer a Andrew en 2010, se casaron y empezaron a cultivar granos juntos.

El paso a la ganadería fue desafiante para ella. "Hubo muchas cosas que tuve que aprender, lamentablemente, por ensayo y error", comenta.

Para mejorar sus conocimientos, Perepelkin realizó un curso de educación continua en el Olds College of Agriculture and Technology en Olds, Alberta. Fue entonces cuando se entusiasmó al ver un video sobre lo que la IA podría hacer por los agricultores.

Contratar empleados resultaba costoso, especialmente al inicio cuando no se tiene claro lo que se busca. "Es difícil capacitar a alguien", menciona Perepelkin.

Innovación en la granja

Gracias al desarrollo de OneCup AI, los Perepelkin ahora pueden supervisar la salud, actividad, nutrición y crecimiento de su ganado a través de cámaras equipadas con tecnología de reconocimiento facial, conocida como 360 Live ID.

Mokah Shmigelsky, CEO de OneCup AI, afirma que su tecnología, el sistema de Vigilancia y Rastreo Bovino o 'BETSY', ha estado en el mercado desde 2022, y ya se han instalado 140 sistemas en todo Canadá.

"Los productores están muy entusiasmados con nuestro sistema, y ofrecen retroalimentación constante para poder mejorar la experiencia del usuario", dice Shmigelsky.

La idea de BETSY surgió durante una conversación familiar, cuando un pariente expresó el deseo de identificar vacas sin etiquetas, y se preguntó si sería posible hacerlo a través de computadoras y cámaras. Geoff Shmigelsky, el cerebro detrás de OneCup AI, desarrolló el sistema que más tarde se probó en la ganadería de sus familiares.

"Cuando BETSY detecta un animal que está pariendo, envía un mensaje de texto al productor", explica Shmigelsky. Esta herramienta es de gran ayuda para Perepelkin, que tiene un rebaño de 100 cabezas y no necesita levantarse cada pocas horas durante la noche para verificar el parto de las vacas; en cambio, recibe notificaciones y puede ver las cámaras desde su teléfono o computador.

Además, la tecnología permite distinguir entre dos vacas pariendo una al lado de la otra y resolver problemas como el intercambio de crías.

Esta herramienta no solamente se ha convertido en un aliado para la gestión de la ganadería, sino también para la comercialización de su carne. Hace cinco años, Perepelkin empezó a vender carne directamente de la granja a la mesa. "Superó completamente a la tienda de comestibles", señala. Así, amigos y familiares urbanos de Perepelkin pudieron disfrutar de carne fresca de granja. La gama de productos se ha expandido y ahora ofrecen desde carne molida y pepperoni hasta salchichas, filetes y rosbif.

Gracias a la tecnología de IA, los Perepelkin han podido optimizar sus operaciones ganaderas y están planeando abrir una tienda en su propiedad en un futuro próximo.

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