Ciencia

La inteligencia artificial en el cuidado de la salud: más humanos, más costos

Published January 18, 2025

La inteligencia artificial (IA) se ha presentado como una solución prometedora para reducir los costos en el sector de la salud. Sin embargo, a medida que se implementan estos sistemas, surge una realidad inesperada: la necesidad de una gran cantidad de personal humano, lo que a su vez incrementa los costos en lugar de disminuirlos.

La realidad de los sistemas de IA en salud

Los sistemas de IA en el ámbito sanitario requieren una monitorización constante y un personal especializado para asegurar su correcto funcionamiento. Esto incluye no solo el establecimiento de estas tecnologías, sino también su mantenimiento y evaluación contínua. La mayoría de los sistemas de IA no están diseñados para operar de forma completamente autónoma, lo que significa que siempre habrá un equipo humano detrás, actuando como supervisores y responsables de su operatividad.

La falta de estándares claros

Una de las principales preocupaciones es la falta de estándares establecidos para evaluar y monitorizar el rendimiento de los modelos de IA, sean estos habilitados por algoritmos o no. Como señala un profesional del sector, "no hay nada que se pueda señalar hoy en día que represente un estándar sobre cómo se evalúa, monitorea y analiza el rendimiento de un modelo de IA una vez que se ha implementado". Esta falta de normativas genera desafíos adicionales y crea la necesidad de más personal calificado.

Impacto en los costos

Contrario a la creencia popular de que la IA reduciría los gastos operativos, el entorno actual muestra que las inversiones en tecnología deben ir acompañadas de mayores hojas de costos en personal. A medida que más hospitales y clínicas integran sistemas de IA, la demanda de tecnólogos y especialistas en datos aumenta, lo que puede resultar en un aumento de gastos en lugar de ahorros. Por tanto, es vital que las instituciones de salud evalúen cuidadosamente el verdadero costo de implementar estas tecnologías.

Conclusión

Si bien la inteligencia artificial tiene el potencial de transformar el cuidado de la salud, es crucial reconocer que no es una solución mágica. La implementación de sistemas de IA requiere un compromiso significativo de recursos humanos y monitoreo, lo que puede complicar aún más los objetivos de reducción de costos. La clave para el éxito radica en equilibrar el uso de la tecnología con una fuerte estrategia de gestión de personal y procesos.

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