OpenAI pospone el lanzamiento de su tienda de chatbots hasta el próximo año tras la controversia de Sam Altman

El mundo de la inteligencia artificial ha visto días agitados recientemente para OpenAI. Tratando de superar la contienda que involucró al CEO Sam Altman, la organización detrás de ChatGPT ha decidido retrasar el lanzamiento de su tienda de chatbots personalizados hasta el próximo año. La inauguración, originalmente programada para diciembre, ha tenido que ser aplazada debido a varios eventos inesperados que han mantenido ocupado al equipo.

Complicaciones tras la controversia de Sam Altman

La serie de eventos que llevaron a la salida y rápida reincorporación de Sam Altman como cabeza de OpenAI, todos ocurridos en un lapso de cinco días, quizás tienen un rol significativo en este retraso. Este tipo de distracciones son particularmente perjudiciales en el mundo de las startups tecnológicas, donde la velocidad es crítica. Desde el lanzamiento de ChatGPT hace un año, ha habido muchos desarrollos en la industria de la IA, desde el lanzamiento de nuevos chatbots hasta la fama alcanzada por Nvidia, creadora de chips de IA, sin mencionar a los gigantes tecnológicos que han lanzado sus propios chips de inteligencia artificial. Cualquier pausa, incluso de unos pocos días, puede dar ventaja a la competencia.

¿Por qué fue despedido Sam Altman de OpenAI?

Aunque ni la junta anterior de OpenAI ni el mismo Altman han revelado públicamente la razón de su destitución, informes indican que la compañía estuvo cerca de concretar tratos que podrían haberse superpuesto con inversiones personales de Altman. Durante el primer año de Altman como CEO, OpenAI habría firmado una carta de intención para adquirir chips de inteligencia artificial por valor de 51 millones de dólares de la startup Rain AI, compañía en la que Altman aparentemente había invertido una gran suma. Rain AI trabaja en la creación de chips denominados 'unidades de procesamiento neuromórfico' o NPU, que buscan replicar funciones cerebrales humanas y que se afirma requieren menos energía que los chips de Nvidia, de uso actual en ChatGPT. Con un financiamiento de 10 mil millones por parte de Microsoft, Altman ha mencionado la dificultad para obtener chips de IA y la posibilidad de que los chatbots no sean siempre gratuitos debido a los altos costos de procesamiento.

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